Y es que no es cuestión baladí.

El ensayo es uno de los elementos más maltratados de magia, se mire por donde se mire. Sé que esto lo he usado anteriormente, pero en la escala este es el elemento más maltratado a día de hoy.

El porqué de este maltrato se debe a que el mago acostumbra a ver los efectos de magia como algo estanco (culpa de la comercialización de elementos de magia), y por desgracia pocos son los que se dedican o se ponen con el teatro para comprender como funciona esto de los ensayos. Hay que saber que hacemos para comprender mejor cómo mejorarlo.

O debido a que leemos magia americana, más acorde a restaurantes y animaciones de cóctel, es el germen que provoca este error de concepto. Concepto que nos lleva al fracaso en una sesión, que tiene que estar bien cocida y completada.

Está claro que si no se ensaya, no se puede presentar el producto final, tanto es así, que el ensayo es uno de los elementos claves de un número de magia, y me atrevo a decir que es más importante que el número en sí mismo.

Un buen método de ensayo o un mal método de ensayo hace que fracasemos o que seamos los mejores en nuestro ramo, y que solventamos muchos de los errores que puedan surgir en una actuación. Contando con que todos tenemos días buenos o malos, el ensayo tiene que formar parte de nuestra disciplina de trabajo teniendo un lugar concreto dentro de las horas del día y que no esté relegado a algo esporádico o marginal.

Y es que con este tipo de cosas se aplica la historia de la tortuga y la liebre.

La tortuga tiene una meta concreta, que es llegar/preparar la actuación (y la herramienta es el ensayo).

La liebre solo tiene solo como meta ganar a la tortuga, nada más lejos de la realidad, y por lo tanto esa indisciplina hace que fracase en el largo recorrido.

El ensayo, debido a que es la parte más importante de tu trabajo para poder presentar la actuación o el show,  necesita de una planificación previa y de tener todos los puntos amarrados.

Dejo aquí como sería el ensayo de una obra de teatro y cómo se traslada a la magia:

  1. Ensayo de mesa, es el momento donde se leen todos los guiones a la vez, alternando los personajes/técnicos para poder previsualizar como será el producto final. Si hay guión se lee y están presentes los técnicos necesarios, grupo de baile, etc que vayan a participar, si haces magia de cerca, las personas que vayan a participar, si es necesario, si hay publico, lógicamente no van a poder estar presentes. Este tipo de ensayos se hacen un mínimo de 2 o 3 veces por cada acto antes de comenzar con la siguiente fase.
  2. Ensayo (propiamente dicho, el engrudo de todo) en los que se repetirán todos los movimientos y frases hasta que quede agusto del director, ¿no tienes director?, deberías, no puedes hacer  el mismo trabajo de director-espectador-actor a la vez, creeme, no puedes. Además tienes que tener un vestuario de ensayos y un material de ensayos, porque es donde van a salir las cosas mal, donde vas a tener que cambiar las cargas, y si se te estropea ese material o se estropea el vestuario, tienes la seguridad de tener el de actuaciones aparte. Eso no quiere decir que el material de actuar tenga que estar recién desempaquetado; en el caso de las barajas necesitan algo de sobeteo antes, los pañuelos necesitan que les quites el apresto, y así… En estos ensayos se reservan unos que se van intercalando para peluquería, vestuario, atrezzo y ensayos técnicos.
  3. Ensayo al pie, para ensayar salidas y entradas de escena, para ensayar las zonas de transición y demás.
  4. Ensayo general, pues lo que es, un ensayo general, con T O D O S los elementos finales, aquí hay que llegar con el vestuario al completo, los materiales al completo, lo que sería todo preparado para actuar.
  5. Ensayo general con público, en este caso sería hacer el pase, pero con público concreto en plan familiares, amigos, programadores, representantes; no te dejes engañar, este ensayo tiene que ser como la representación real, es un ensayo para afianzar todo lo trabajado anteriormente.
  6. Pre-estreno. Se trata esta vez de una pase con todo el público presente, pero no son amigos ni familiares ni personas del ramo, aquí ya es público real.

Este es un pequeño resumen de los pasos necesarios para poner el ensayo en el ojo del huracán entre las prioridades de los magos, y espero que se empiece a tratar como la herramienta que és y no como un mero trámite para llegar a la actuación.

Bibliografía:

Gómez García,Manuel. Diccionario del teatro, Ediciones Akal, Madrid, 1997, ISBN 978-84-460-0827-9